Semana 14 de embarazo


¿Quieres saber cómo se ve tu bebé en la semana 14 de embarazo? ¡Sigue leyendo!

¡Hola! Si estás en la semana 14 de embarazo, ¡felicidades! Ya estás en el segundo trimestre y tu bebé está creciendo a pasos agigantados. En esta semana, el feto ya tiene una apariencia completamente humana y está empezando a moverse dentro del vientre materno.

Pero ¿qué más ocurre en esta etapa del embarazo? ¿Cómo te sientes tú como madre?

En este artículo te contaremos todo lo que necesitas saber sobre la semana 14 de embarazo, desde el desarrollo del bebé hasta los síntomas y cuidados que necesitas tener como futura mamá. ¡Sigue leyendo para descubrirlo todo!

Desarrollo del bebé en la semana 14 de embarazo

En la semana 14 de embarazo, tu bebé ha alcanzado un tamaño de entre 8 y 9 centímetros y pesa alrededor de 40 gramos. A medida que su cuello se elonga, sus orejas se desplazan hacia arriba y adquiere una apariencia totalmente humana. Los rasgos faciales del bebé ya están perfectamente definidos, con labios en la boca, cejas y los primeros cabellos. A pesar de que los ojos siguen cerrados, el bebé ya es capaz de mover los párpados.

Semana 14 de embarazo

La cabeza del feto sigue estando flexionada, con la barbilla tocando constantemente el pecho, mientras que el sistema nervioso central, incluido el cerebro y la columna, ya tiene sus componentes básicos. Las conexiones entre células nerviosas individuales se vuelven más organizadas, y el cerebro se especializa en su función de respuesta motora, permitiendo que los músculos faciales se muevan. Además, el cerebro del feto está muy activo debido al aumento de líquido amniótico.

El bebé practicará la habilidad de llevarse la mano a la boca y comenzará a flexionar brazos y piernas. Los brazos han crecido y ahora guardan mejor proporción con el resto del cuerpo. Aunque aún es muy pronto para saber si será niño o niña, los genitales del bebé ya terminaron de desarrollarse.

En cuanto a los órganos internos, el hígado del feto comienza a fabricar bilis y es muy grande en comparación con los demás órganos, ya que es el responsable de la formación de las células sanguíneas. El bazo, por su parte, empieza a producir glóbulos rojos. La piel del bebé es muy fina, lo que hace que brillen los vasos sanguíneos a través de la superficie del cuerpo, pero con el tiempo se endurecerá. Los folículos pilosos se formarán debajo de la superficie de la piel y los sentidos del gusto y el olfato se desarrollarán.

El corazón del feto late unas 155 veces por minuto, y cuando tú te sientes estresada, el corazón del bebé late aún más deprisa porque percibe tu estrés a través de sustancias mensajeras en la sangre. Por eso, es esencial cuidar de tu bienestar emocional durante el embarazo, ya que afecta directamente el desarrollo de tu bebé.

¿El feto se mueve?

¡Claro que sí! El feto empieza a moverse dentro del vientre materno alrededor de la semana 14 de embarazo. Es una experiencia única y emocionante sentir cómo tu pequeño realiza movimientos y da patadas contra la pared del útero.

Al principio, las mujeres suelen notar estos movimientos como un ligero hormigueo en el abdomen. Es posible que las madres primerizas tarden un poco más en reconocer estos movimientos, ya que no están familiarizadas con la sensación. Pero no te preocupes, pronto aprenderás a identificar cada uno de los movimientos de tu bebé y disfrutarás de esta maravillosa etapa del embarazo.

¿Cuánto pesa y mide un feto de 14 semanas?

¡Hola amiga! ¿Sabías que a las 14 semanas de embarazo, tu pequeño feto ya mide aproximadamente 8,5 cm desde la cabeza hasta las nalgas? Sí, es cierto, ¡ya está creciendo rápidamente! Además, su peso es de unos 45 gramos, lo que lo hace similar a un melocotón en tamaño y peso.

Es fascinante cómo, en tan poco tiempo, ese ser diminuto ya ha experimentado tantos cambios y transformaciones. A medida que pasan las semanas, irás notando más y más avances en su desarrollo, y te sorprenderá la rapidez con la que evoluciona dentro de ti.

Disfruta de esta maravillosa etapa de tu embarazo, pues es una experiencia única e inolvidable en la vida de toda madre. ¡Y no te preocupes, que aquí estaré para acompañarte en este emocionante viaje y compartir contigo toda la información que necesites!

Semana 14 de embarazo: la madre

En la semana 14 de embarazo, ya hay aproximadamente 100 ml de líquido amniótico en la matriz. Por otro lado, las hormonas pueden estar causando estragos en tu estado de ánimo, y es normal experimentar reacciones exageradas, irritabilidad y cambios de humor. Además, los niveles elevados de estrógeno en la sangre pueden provocar problemas para dormir y una sensación de inquietud.

Al entrar en el cuarto mes de embarazo, las náuseas matutinas suelen desaparecer, y es posible que te sientas mejor físicamente y con más energía. Este periodo, conocido como el segundo trimestre, suele ser el más cómodo para las mujeres embarazadas. Sin embargo, ten en cuenta que el sistema inmunitario puede estar debilitado, lo que puede aumentar la propensión a resfriados e infecciones. Por ello, es buena idea realizar paseos regulares al aire libre y exponerse al sol para reforzar el sistema inmunitario.

En este momento, tus pechos están comenzando a producir calostro, y puede que los pezones secreten un poco de este líquido denso y amarillo. Además, es fundamental cuidar la espalda, ya que las molestias pueden empeorar a medida que avanza el embarazo.

El deporte se recomienda a partir del cuarto mes de embarazo, y muchas actividades deportivas ligeras, como caminar, hacer yoga o nadar, son recomendables. Estas actividades pueden ayudarte a mantenerte activa y en forma, lo que te será de gran ayuda durante el embarazo y también en el proceso de recuperación tras el parto.

¿Antojos?

Te sorprenderá saber que entre un 60% y un 90% de las embarazadas experimentan antojos, esos impulsos inesperados de comer ciertos alimentos durante el embarazo. ¡No estás sola en esto! Los alimentos más deseados suelen ser dulces, chocolate, frutas ácidas, productos lácteos, comida muy condimentada, helados y refrescos.

Quizás te preguntes por qué te sucede esto. La causa más admitida de los antojos es la alteración del sentido del gusto y olfato debido a los cambios hormonales en el embarazo. Estos cambios hacen que tu percepción de los sabores y olores sea diferente, por lo que es posible que sientas una mayor atracción por algunos alimentos.

Así que, cuando sientas ese impulso incontrolable de comer algo específico, no te preocupes, es algo completamente normal en esta etapa de tu vida. Pero eso sí, intenta mantener una dieta equilibrada y no excederte en el consumo de ciertos alimentos, para asegurar una buena salud tanto para ti como para tu bebé.

Escrito por: Mónica Pascual

Mónica Pascual