Semana 21 de embarazo
Desde la semana 21, tu bebe puede dormir y despertarse en ciclos: Aprende más sobre esto.
¡Hola! ¡Bienvenido a la semana 21 de tu embarazo! Este es un momento emocionante en el que tu bebé está creciendo rápidamente y desarrollando nuevas habilidades. En esta semana, el bebé comenzará a dormir y despertarse en ciclos, sus dedos de las manos y de los pies ya están completamente formados y puede chuparse el dedo.
¡Sigue leyendo para descubrir más sobre el crecimiento y desarrollo de tu bebé en la semana 21 de embarazo!
Desarrollo del bebé en la semana 21 de embarazo
En la semana 21 de embarazo, tu bebé ya ha experimentado una gran cantidad de cambios y desarrollo. Sus dedos de las manos y de los pies están completamente formados, e incluso puede chuparse el dedo. Sus ojos también han evolucionado, y aunque todavía no poseen pigmentación en el iris, ya comienzan a abrirse y a percibir la luz. Además, las pestañas y las cejas están formadas, así como las uñas y las huellas dactilares.

El sistema digestivo del pequeño está madurando día a día. Ahora puede tragar líquido amniótico, absorber los nutrientes de este líquido en el intestino delgado y pasar el resto al intestino grueso. Tragar líquido amniótico también ayuda a que el sistema digestivo siga creciendo y madurando. Aunque los nutrientes del bebé siguen proviniendo de ti a través de la placenta, el líquido amniótico le permite absorber pequeñas cantidades de azúcar.
El corazón del bebé late entre 120 y 160 veces por minuto, y ya está comenzando a dormir y despertarse en ciclos sutiles. A medida que sus vías nerviosas se desarrollan, se expanden y maduran, ganará control sobre sus acciones, aunque por ahora sus movimientos siguen siendo actos reflejos. Su cerebro en desarrollo también está empezando a captar señales eléctricas de su cuerpo relacionadas con sensaciones como la presión, el dolor, la luz o la temperatura.
En cuanto a la producción de células sanguíneas, el hígado y el bazo del bebé han estado produciéndolas, pero ahora la médula ósea también puede crearlas. De hecho, los espacios de la médula ósea del bebé se han desarrollado lo suficiente como para contribuir en la formación de glóbulos rojos, y se convertirá en el centro más importante de producción de glóbulos rojos en el tercer trimestre. El hígado y el bazo dejarán de producir estas células sanguíneas antes del nacimiento.
En relación con el desarrollo de los genitales, en las niñas comenzará la formación de la vagina, mientras que en los niños se producirá el descenso testicular hacia el escroto. Por último, las glándulas sebáceas del bebé están en pleno funcionamiento, aportando a la piel la grasa necesaria para mantenerse hidratada y elástica al nacer.
Tamaño y peso del feto en la semana 21
¡Hola amiga! Te cuento que en la semana 21 de embarazo, tu pequeño feto ha alcanzado un tamaño de aproximadamente 18 centímetros y un peso cercano a los 300 gramos. ¿Te lo puedes imaginar? Se parece a un plátano pequeño.
Aunque seguramente estás emocionada por ver cómo crece día a día, es normal que notes que el crecimiento ya no es tan rápido como en las semanas anteriores. Esto se debe a que el desarrollo se vuelve un poco más gradual a medida que el embarazo avanza.
De todas formas, no te preocupes, porque este cambio en el ritmo de crecimiento es completamente normal y esperado. Así que sigue disfrutando de esta maravillosa etapa de tu embarazo y compartiendo tus experiencias con tus seres queridos.
El cuerpo de la madre en la semana 21
En la semana 21 de embarazo, es probable que hayas experimentado un aumento de peso considerable, que oscila entre 4,4 Kg y 9,2 Kg. Este incremento se debe al crecimiento del bebé, lo que provoca que tu barriga también aumente de tamaño.
Debido a esta expansión, es posible que empieces a notar la aparición de algunas estrías en tu cuerpo. Las estrías son el resultado del desgarro de la capa interna de la piel, que se produce cuando la piel se estira demasiado y rápidamente. Este estiramiento puede causar pequeñas rasgaduras debajo de la superficie de la piel, que se manifiestan en forma de estrías.
Es importante tener en cuenta que aumentar de peso de manera excesiva o muy rápida incrementa las posibilidades de desarrollar estrías. Por ello, es fundamental llevar una alimentación equilibrada y mantener un ritmo de aumento de peso adecuado, conforme a las indicaciones de tu médico o especialista.
Además de las estrías, el rápido crecimiento de la barriga también puede ocasionar erupciones en la piel del vientre, lo que puede resultar incómodo. Sin embargo, estos cambios son normales y forman parte del proceso de embarazo. No dudes en consultar a tu médico si tienes dudas o preocupaciones al respecto.
Incremento del apetito
Amiga, seguramente has notado que durante el embarazo tu apetito ha ido en aumento. Esto se debe a que tu bebé necesita más nutrientes a medida que crece, los cuales obtiene a través de la placenta y el líquido amniótico. Así que no te preocupes, ¡es completamente normal!
Además, es bastante común que las mujeres embarazadas experimenten antojos y coman diferentes alimentos y bocadillos. Aunque ceder a esos antojos no siempre es malo, te aconsejo que elijas opciones de alimentos más saludables, como frutas, en lugar de caer en la tentación de los alimentos procesados. De esta manera, estarás brindándole a tu bebé los nutrientes esenciales que necesita para desarrollarse adecuadamente.
Por otro lado, las vitaminas del grupo B son fundamentales durante el embarazo, ya que aportan energía para el desarrollo de tu bebé, ayudan a tener una buena visión y contribuyen en la construcción de la placenta y otros tejidos del cuerpo. Por ello, asegúrate de incluir en tu dieta alimentos ricos en estas vitaminas, como los cereales integrales, las legumbres y los frutos secos, entre otros.
En resumen, disfruta de este maravilloso proceso de gestación, pero no olvides prestar atención a tu alimentación, eligiendo opciones nutritivas y saludables para ti y tu bebé. ¡Estoy segura de que serás una madre increíble!
Relaciones sexuales en la semana 21 de embarazo
En la semana 21 de embarazo, es natural que tengas dudas sobre si es seguro o no mantener relaciones sexuales. Quiero contarte que no hay motivo para tener miedo, ya que el bebé está perfectamente protegido dentro de la bolsa de líquido amniótico y, además, el cérvix y el tapón mucoso actúan como barreras adicionales.
De hecho, las relaciones sexuales durante el embarazo pueden traer varios beneficios tanto para ti como para el feto. Por un lado, pueden ayudarte a mejorar tu estado de ánimo, lo cual es fundamental en esta etapa tan especial. Además, el contacto íntimo con tu pareja fortalece el vínculo afectivo entre ambos, algo esencial para enfrentar juntos los desafíos de la paternidad y maternidad.
Otro aspecto interesante es que, debido a los cambios hormonales que experimentas, es posible que tus orgasmos sean más intensos en esta etapa. Y, como si fuera poco, las relaciones sexuales también pueden favorecer una mayor tolerancia a las contracciones de parto en el feto, lo cual será de gran ayuda cuando llegue el momento de dar a luz.
Así que, como puedes ver, no hay razones para privarte de disfrutar del sexo durante la semana 21 de embarazo. Eso sí, siempre es importante escuchar a tu cuerpo y respetar tus límites, así como comunicarte abierta y sinceramente con tu pareja sobre tus necesidades y deseos en esta etapa.